La historia de Panamá de se encuentra fuertemente vinculada por nuestra posición estratégica desde el punto de vista geográfico, que une América del Norte con América del Sur y que separa el océano Pacífico del océano Atlántico.
Sin duda alguna la separación de Panamá de Colombia, además de las razones económicas, de abandono a lo que los colombianos sometían al Istmo de Panamá, fue decisivo el hecho que los norteamericanos vislumbraran la importantísima posición geográfica de nuestro país y sus deseos por construir el Canal de Panamá. Su apoyo en la consolidación de nuestra separación fue concluyente.
En el año 1903, Los norteamericanos mostraron su interés en la construcción del Canal de Panamá, desde que la compañía francesa inició la obra, ante la cancelación de los trabajos
por parte de los franceses, como consecuencia de la bancarrota de la empresa constructora, los norteamericanos le hicieron saber a los miembros del gobierno colombiano (recordemos que Panamá formaba parte de Colombia), su interés en que se les autorizará continuar la obra de construcción, Colombia se negó, en reacción los Estados Unidos respaldan a Panamá en sus intentos separatistas, logrando así que el 3 de noviembre de 1903 Panamá logrará su separación de Colombia.
La ejecución del plan separatista estuvo a cargo de Don Manuel Amador Guerrero, quien fue la persona que viajó a Estados Unidos en busca de apoyo. Por su parte en Panamá se logró la cohesión de importantes jefes liberales y el significativo apoyo del Comandante del ejército colombiano el General Esteban Huertas.
Con toda la logística establecida se concretó el plan separatista a fin de lograrlo un día no definido del mes de noviembre de 1903. Este plan estuvo a punto de no ejecutarse debido a un rumor propagado en Colombia, según los cuales existían informes que daban cuenta de una supuesta invasión nicaragüense al Istmo por la región de Calobeborá, en la costa atlántica de Panamá.
Los rumores y los informes que indicaban que algo se estaba forjando en Panamá, dio lugar a que Colombia movilizara el Batallón de Tiradores desde Barranquilla. El comandante a cargo de este batallón, tenía instrucciones precisas para reemplazar a José Domingo De Obaldía y al general Esteban Huertas, debido a la pérdida de confianza de ambos en en Bogotá.
Decapitado el contingente militar colombiano, se aceleraron las acciones para declarar la separación del Istmo. La Junta Revolucionaria declaró el 3 de noviembre en horas de la tarde la independencia del Istmo.
El Concejo Municipal se reunió y proclamó en un acta la voluntad popular de libertad y de establecer un gobierno propio, independiente y soberano.
El Istmo necesitaba un emblema, es así como Don Manuel Encarnación Amador diseña nuestra bandera nacional y es confeccionada por Doña María De La Ossa de Amador.
La bandera panameña es un rectángulo dividido en cuatro carteles; el primero superior al lado del asta, es de color blanco con una estrella de cinco puntas de color azul, en la misma dirección pero en la parte inferior es de color rojo, el primero inferior cerca del asta es de color azul y el de debajo de éste es de color blanco con una estrella de cinco puntas de color roj o.
Los colores se escogieron representando los partidos políticos de la época, el rojo es alusivo al Partido Liberal y el azul al Partido Conservador, el blanco es la paz entre ambos. Las estrellas simbolizan la fuerza y la autoridad inherente al desarrollo del país.
A la bandera panameña se le realizó una ceremonia simbólica de bautizo, el mismo se llevó a cabo el día 20 de diciembre de 1903, siendo los padrinos; el Dr. Gerardo Ortega con Doña Lastenia de Lewis y Don José Agustín Arango con Doña Manuela M. de Arosemena, el reverendo Fray Bernardino de la Concepción García oficio la ceremonia religiosa.
La bandera fue acogida legalmente mediante la Ley 64 de 1904 de la Asamblea Nacional de Constituyentes, su legalización definitiva ocurre a través de la Ley 4 de 1925, de la Asamblea Nacional y ratificada por la Ley 28 de marzo de 1941.
Felipe Bunau Varilla, en Estados Unidos le presenta un modelo de bandera para el Istmo a Manuel Amador Guerrero, a éste no le fue de su total agrado y lo presenta ante algunos miembros de la junta revolucionaria, quienes lo rechazan.
El 5 de noviembre es de singular importancia en virtud que todo estaba aparentemente consolidado, y es que mientras el día 3 de noviembre en Panamá los hermanos Domingo y Pedro Díaz, realizan una concurrida manifestación saliendo del Parque de Santa Ana hasta Catedral, llegando al Palacio Municipal en el cual se llevaba a cabo una reunión presidida por Demetrio H. Brid, en la cual se proclama oficialmente la separación.
El día 4 de noviembre se realiza un Cabildo Abierto, donde centenares de panameños, firman un manifiesto de apoyo a la decisión edilicia.
Aparentemente todo se estaba desarrollando bien y la separación era un hecho, pero no era así, el 3 de noviembre en la Bahía de Colón desembarcaban los barcos colombianos “Cartagena” y “Alexander Bixo”, y el norteamericano “Nashville”.
De los barcos colombianos desembarcaron 500 hombres armados con deseos de combatir, eran comandados por los experimentados generales Tobar y Amaya, su propósito era dominar este puerto y luego desplazarse hacia la capital, esto fue impedido por autoridades del ferrocarril, quienes fungían como un grupo de la agencia de Estados Unidos, quienes no estaban oficialmente establecidos en virtud que Panamá no era una nación reconocida, fue mediante pretextos que impidieron el traslado de estas tropas a la capital. Sólo a sus generales fueron trasladados a la capital, resultando prisioneros.
Los 500 hombres que permanecían en Colón bajo las órdenes del coronel Torres no aceptaban de ninguna manera ser movilizados. El coronel airado y vociferante, amenazaba con matar a todo panameño, norteamericano o extranjero que se opusiera a su avance.
Es así como se da inicio al diálogo entre los miembros de la Junta Revolucionaria de Colón, el Alcalde Eleazar Guerrero y otras autoridades locales, con la finalidad de persuadir a los colombianos de que abandonaran Panamá, el objetivo se logró con un convincente razonamiento de orden económico (0cho mil dólares) que terminó por apaciguar al coronel Torres.
Partiendo el barco “Orinoco” hacia Colombia con todos los soldados.
Concluidos estos hechos, Don Juan Antonio Henríquez; miembro de la Junta revolucionaria de Colón, remite un telegrama a Panamá que a su letra decía “Sólo ahora, 7:30 pm. Puede decirse que la independencia de Panamá está asegurada”.
De este último texto se desprende la importancia de los colonenses en la obtención de nuestra independencia de 1903, todos los panameños debemos reconocer sus méritos, pues gracias a su valentía y decisión la misma se concretó.
Una vez Panamá logra su separación de Colombia los Estadunidenses, quienes ya habían vislumbrado la estratégica posición geopolítica de Panamá, además de la importancia de la construcción del Canal Interoceánico inician todo los trámites a fin de lograr su construcción.
El 18 de noviembre, los derechos del canal fueron vendidos a los Estados Unidos.
La obra fue finalizada en el año 1914, desde entonces nuestro país inicia un ciclo importante de su destino manifiesto como lo llamó Bolívar, de “Ser Puente del Mundo y Corazón del Universo”, los norteamericanos construyeron el Canal.
Allí se inicia en Panamá otro ciclo histórico de lucha por lograr una patria libre y soberana, pues con la construcción del Canal de Panamá, los norteamericanos trajeron consigo otras intenciones, entablaron en nuestro territorio gran cantidad de bases militares, dentro de la franja canalera establecieron límites territoriales donde todo se regía bajo sus leyes norteamericanas, establecieron un territorio dentro del nuestro, donde incluso tenían sus propio gobernador.
Muchas fueron las injusticias, humillaciones y vejámenes que sufrió nuestra población y que trajo consigo innumerables enfrentamientos y conflictos entre los panameños que reclamaban su derecho soberano y los norteamericanos que se habían arraigado en nuestras tierras y no querían bajo ningún concepto renunciar a ellas, sobre todo por su gran valor estratégico para el control de la zona cercana a su territorio. Recordemos que en nuestro país se establecieron un gran número de bases militares norteamericanas.
Muchas fueron las luchas generacionales por alcanzar nuestro derecho soberano, el esfuerzo germinó y hoy Panamá Soberana puede decirle al mundo “Panamá Puente del Mundo y Corazón del Universo”.// Educa Panamá (EDU)
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